domingo, 21 de septiembre de 2008

Me encuentro a escasos minutos de que ella cumpla años, de que abandone sus diecisiete años, y sin embargo ella se encuentra a unos cuantos kilómetros de distancia.

Ni que la estuviera pasando mal, pero me resultan incontenibles las ganas de abrazarla y mimarla (por eso voy a ser del día de su vuelta su ficticia fecha de cumpleaños). Sé que va empezar su cumpleaños de la mejor manera, y cuanto quería este viaje, pero el egoísmo me resulta incontrolable. ¿Tan mal está extrañar a mi prima? Sé que es un poco egoísta y lo reconozco, pero puedo decir que hasta me parece un poco sano.

Ella sabe todo lo que es para mi, lo que fue criarme con ella, pasar mi infancia y mi vida hasta el día de hoy con ella, que me acompañe en momentos muy difíciles y que me entienda y me comprenda como nadie, porque puede un amigo entenderte y escucharte, pero ella siempre lo vivió conmigo desde adentro.

No necesito hacerle muestras de cariño públicas ni nada por el estilo, pero quiero hacerle un mínimo homenaje desde acá ya que no la pude ver, para que vea que me acuerdo de ella.

Felí cumpleaño flaca



(esto fué escrito el día de su cumplaños, minutos antes, pero no lo pude subir)

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