miércoles, 10 de septiembre de 2008

el Fader


¿Cómo puede alguien imaginarse todo lo que puede provocarte este edificio (pasaje incluido) y la gente que lo habitan?¿Cómo saber antes de adentrarte en el mundo que lo rodea todo lo que significará en tu vida?
Creo que son un mínimo del porcentaje de todo el alumnado que ha pasado por el colegio y no logro encariñarse con este y todo lo que representa. No me imagino no haber entrado al Fader y no haber conocido a la hermosa gente que conocí, y que me queda por conocer.
Aunque por suerte no terminó y falta bastante para que eso suceda, creo que va a ser una de las mejores etapas de mi vida.
Vos lo miras (aunque cause tristeza verlo así), y ¿cómo no quererlo? es mi colegio, es sin duda mi segunda casa, porque al fin y al cabo termino pasando más tiempo en el Fader y en el pasaje que en mi propia casa, que taller, que teoría, que quedarme en el pasaje, y así son mis días. A pesar de que pueda parecer monótono nunca lo es, nunca sabes lo que te espera al llegar al pasaje. Con la peculiaridad de su gente, creo que no se encuentra gente así tan fácilmente.
Es increíble como me cambia el humor al entrar al pasaje (esto lo he hablado bastantes veces, y con distinta gente, pero es la posta) escuchar las risas, de vez en cuando alguna que otra guitarra, y esas voces conocidas. A mi por lo menos me pasa lo siguiente, puedo tener un día horrible hasta el momento, pero se que en el pasaje y adentro voy a encontrar gente que me contiene, me ayuda, me cuida, y no siempre es alguien muy cercano. Pero están esos que se ganaron su lugar, esos que me llenan de orgullo y alegrías.
¿Y cómo no querer a mi segunda casa?

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